Una auditoría realizada en 2014 por la Contraloría General del Estado a la Universidad Pública de El Alto (UPEA) identificó 35 irregularidades, entre ellas, fondos de avance desembolsados sin descargo, venta de valores utilizados en gastos varios, anticipos otorgados en bienes y servicios que no fueron recuperados, incorrecta supervisión y ejecución de obras, falta de evidencia documental en la otorgación de becas, comprobantes de contabilidad sin suficiente respaldo, informaron fuentes institucionales.
El ministro de Economía, Mario Guillén, dijo que se hizo conocer todas esas observaciones a las autoridades de la UPEA, en la reunión que se desarrolló en el Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) el sabado.
«Quedamos en que vamos a seguir en el diálogo, pero todo debate en el ámbito económico tiene que ser con auditorías, porque nos preocupan las observaciones que ha tenido la Contraloría en 2014″, dijo Guillén.
Guillén remarcó que esas observaciones preocupan tomando en cuenta que muchas de ellas no fueron subsanadas; además, dijo que se debe analizar lo que pasó con las auditorías internas de 2015, 2016 y 2017.
A su juicio, auditar las gestiones anteriores para transparentar el uso de los recursos económicos en la UPEA es la única forma de seguir asignando más dinero a esa universidad.
Desde abril, la UPEA se moviliza en las calles de El Alto y La Paz demandando la modificación de la Ley 195, de Coparticipación Tributaria, para obtener un mayor presupuesto.
Tras un acercamiento y después de establecer acuerdos iniciales con la UPEA, el Gobierno promulgó una ley que adiciona 70 millones de bolivianos al presupuesto anual de esa casa de estudios superiores.