Miles de alteños se movilizaron ayer y protagonizaron enfrentamientos en una jornada que rebasó a la Policía hasta causar destrozos en las oficinas de la Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen (FELCC), Tránsito de El Alto y en la línea morada de Mi Teleférico.
Estas protestas rechazaron la renuncia del presidente Evo Morales y defendieron el proceso de cambio. Asimismo, acusaron a la Policía por armar un motín; y a Carlos Mesa y a Luis Fernando Camacho, por incentivar paros que provocaron la renuncia del Jefe de Estado.
Con este propósito, las movilizaciones gritaron estribillos como: «ahora sí, guerra civil, ahora sí, guerra civil»; «Mesa, Camacho, El Alto está emputado»; «Camacho fuera de El Alto»; «El Alto se respeta, la Wiphala se respeta», «El Alto de pie, nunca de rodillas»; «Mesa, Camacho, queremos tu cabeza«, entre otros.
Producto de estas protestas, las oficinas de Tránsito de El Alto fueron saqueadas, después los grupos se dirigieron a la Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen, donde prendieron fuego.
La Policía no pudo contener a los manifestantes y terminó replegándose, hasta que en horas de la noche la Fuerzas Armadas coordinaron para salir a resguardar el caos, que también se extendió a las ciudades de La Paz y Cochabamba.
El 10 de noviembre de 2019, el presidente Evo Morales renunció a su cargo como presidente de Bolivia, hecho que no gustó a la Federación de Juntas Vecinales de El Alto y otros sectores, por lo que se armaron movilizaciones en distintas zonas de esta urbe.
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