CDIMA logró formar a cerca de 50 mil jóvenes y mujeres indígenas de Bolivia

La Paz, 05 de Septiembre, 2019 (CDIMA).- El Centro de Desarrollo Integral de la Mujer Aymara Amuyt’a (CDIMA) celebra su trigésimo aniversario (30 años) con la  formación de 48.595 mujeres y jóvenes indígenas de base y representantes de diferentes organizaciones sociales de Bolivia.

Según la directora ejecutiva de esta institución, Alicia Canaviri Mallcu, en 30 años de trabajo, el CDIMA logró desarrollar, consolidar y certificar el liderazgo de 3.919 mujeres y jóvenes Indígena Originario Campesinas, mientras que 44.676 mujeres y varones de base de diferentes organizaciones sociales fueron capacitadas sobre sus derechos  en las Escuelas Móviles de Formación, seminarios y talleres de réplica de conocimientos en la ciudad de El Alto y en áreas rurales del país.

“Del total beneficiarios certificados, 2.989 son mujeres y 930 varones, quienes fueron certificados como peritos y promotores calificados en liderazgo, artesanías, computación y gastronomía andina en diferentes casas superiores como la Universidad Católica y la Universidad Salesiana de Bolivia”, detalló.

De acuerdo a datos estadísticos del CDIMA, desde 1993 hasta el pasado año 2018, fueron certificados 10.638 jóvenes varones y 33.886 personas (mujeres y hombres) de base de las organizaciones sociales en diferentes comunidades rurales de La Paz, Oruro y Parte de Cochabamba).

Canaviri,  explicó que “las Escuelas de Formación fueron instalados en diferentes comunidades del pueblo aymara y qichwa de los departamentos de La Paz, Oruro y Cochabamba beneficiando principalmente a mujeres y jóvenes indígenas de escasos recursos económicos que no tuvieron la oportunidad de acceder a casas superiores de estudio”, afirmó.

Afirmó que el CDIMA va cumpliendo sus objetivos de promover el empoderamiento de la mujer y de la juventud Indígena Originaria Campesina y lograr el ejercicio de sus derechos además de la reafirmación de su identidad cultural para lo que se fundó CDIMA.

Según Canaviri hoy gran porcentaje de esta población vulnerable ha logrado perder el miedo, hablar en público, recuperó su confianza, fortaleció su autoestima y lo más importante ahora muchas de ellas conocen y ejercen sus derechos gracias a la formación recibida en las Escuelas de Formación del CDIMA.

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