Historia del comportamiento electoral alteño

Por Abdón Zárate (1)

Comportamiento electoral

Las elecciones, como una forma de participación masiva, surge a finales del siglo XVIII, como parte del ejercicio democrático. Las elecciones tienen una trascendencia política porque supone el reconocimiento de la voluntad popular en el quehacer político y abren el acceso, en libertad, al poder institucional y a su ejercicio legítimo y legal (Torrens, 2019). Las elecciones son una forma de ejercicio democrático por el que los gobernados delegan a los futuros gobernantes un poder delegado.

El Estado Plurinacional adopta para su gobierno la forma de democracia intercultural integrada por la democracia participativa, la democracia representativa y la democracia comunitaria. Según la Ley del Régimen Electoral (Ley Nº 026) “la democracia representativa se ejerce mediante la elección de autoridades y representantes” (Art.9), “los ciudadanos participan en el gobierno y en la toma de decisiones por medio de sus representantes elegidos democráticamente a través de las organizaciones políticas” (Art.47), siendo el sufragio un derecho que se expresa por el voto y su escrutinio público.

El Alto nuevamente es partícipe de un proceso electoral, el 17 de agosto de 2025. Parece un cliché decir que asistimos a una “fiesta democrática”, sin embargo, su importancia radica en que mediante la participación electoral los ciudadanos pueden influir directamente en el sistema político. La función de las elecciones, entonces, busca proporcionar representación, producir gobierno, influir en las políticas públicas, otorgar mandatos, agregar legitimación, consolidar élites e influir en las organizaciones políticas.

La participación electoral es una forma de acción política mediante el cual se toma parte en la vida política a través del voto, por el que los ciudadanos ejercen su poder de delegar su confianza hacia algún líder político u organización política. La actividad de participación en el proceso electoral de forma activa, hace al comportamiento lectoral. “El comportamiento electoral es visto como un tipo de participación que permite a los individuos asimilarse socialmente” (Vitullo), es decir, refleja conductas socialmente practicadas con el objeto de influir en el sistema político, en este caso, mediante el voto. Todo el proceso electoral debe estar guiado por una normativa, que hace al sistema electoral de una comunidad política.

Historia electoral de El Alto

La historia electoral se desarrolla evolutivamente dentro del país, lo que también sucede en el municipio alteño, hasta lograr una cierta autonomía, donde puede ya identificarse una cierta cultura política específica, en relación a otros municipios.

De acuerdo a los documentos oficiales del Órganos Electoral Plurinacional, Atlas Electoral de Bolivia (T. I y III), el país ha atravesado distintos momentos de ejercicio de la democracia representativa, por el que, en aplicación de sistemas electorales específicos, se ha podido transformar votos en representantes, quienes a su vez han ejercido democráticamente un poder delegado. Veamos la historia desde El Alto.

El gobierno militar del Gral. David Padilla hizo la convocatoria para el 1 de julio de 1979. De las 8 candidaturas postulantes llegaron a obtener un empate virtual entre las opciones de la UDP de Hernán Siles Suazo con un 36,0%, el MNR de Víctor Paz Estensoro con 35,9% y ADN de Hugo Banzer Suárez con 14,9%, situación que obligó a que el Congreso, por norma, deba definir entre los tres candidatos más votados. Al no lograrse elegir, en este escenario, por varias oportunidades, a un candidato por simple mayoría se produce un “empantanamiento”, teniendo que elegirse al presidente del senado Walter Guevara, quien asumirá la presidencia el 9 de agosto de 1979. El Alto aún no había nacido como municipio, pero su población como parte de La Paz había apoyado en ese entonces a la UDP.

Para el mes de noviembre de 1979 se inicia el golpe de estado con el Gral. Alberto Natusch Busch, quien renunció para que, posteriormente, asumiera Lydia Gueiler, quien convocaría a Elecciones Generales para el 29 de junio de 1980, mismo que llevados a cabo, no pudieron ser asumidos por un nuevo golpe del Gral. Luis García Mesa. En estas Elecciones de los 13 partidos, obtuvo mayoría la UDP de Hernán Siles con un 38,7 % muy por delante del MNR y ADN. La población alteña, que iría emergiendo como una subalcaldía de La Paz, decantó su apoyo, también por la UDP.

Las Elecciones Generales del 14 de julio de 1985, se debió a la reducción del mandato del gobierno de Hernán Siles Suazo (UDP). Asimismo, se reforma el sistema electoral, al incorporarse las circunscripciones, una nacional, nueve departamentales, además de circunscripciones municipales (alcaldes y órganos deliberantes), especialmente en áreas urbanas. De los 18 partidos participantes, obtuvieron una mayor votación, en primer lugar ADN del Gral. Hugo Banzer con 32,8%, en segundo el MNR de Víctor Paz con 30,2% y en tercero el MIR de Jaime Paz Zamora con 10,2%. Es el inicio del “Pacto por la Democracia”, por el que los parlamentarios generarán alianzas para lograr la presidencia de Víctor Paz Estensoro.

En aplicación de la Ley Orgánica de Municipalidades, en El Alto por primeva vez eligió una Junta Municipal, repitiéndose la preferencia electoral nacional, pues de los cuatro concejales, con el 28% de los votos son elegidos Juan Polo Maguiña y Daniel Santander Quenallata, como concejales para ADN, el MNR con 14% le correspondió un concejal en la persona de Martirian Vásquez Cabrera y el MIR con el 9% le correspondió uno a Velia Irusta Vásquez. De acuerdo a norma, los concejales eligieron como primer alcalde de El Alto a Juan Polo Maguiña (Fernández, 2021). Ya para las Elecciones Municipales de 1987, es el MIR quien logrará la victoria en esta ciudad, nombrándose alcalde a Luis Vásquez Villamor.

En 1989 se cumple un periodo completo de un gobierno elegido (Víctor Paz) a pesar de los extravíos ideológicos, por el que la izquierda se incorpora al neoliberalismo, mientras que los antes golpistas de derecha aparecen como demócratas. De los 10 partidos políticos participantes, obtienen mejor votación el MNR de Gonzalo Sánchez de Lozada con 25,7%, segundo el ADN de Hugo Banzer Suárez con 25,2%, tercero el MIR de Jaime Paz Zamora con 21,9%, cuarto, como novedad, CONDEPA de Carlos Palenque con 12,3%. Este escenario generaría un “Triple Empate”, teniendo que desconocerse la votación ciudadana, para que los congresistas, por normativa, terminen eligiendo al tercero, posesionando como presidente a Jaime Paz Zamora. El Alto había apoyado a un partido político populista emergente, bajo el liderazgo del compadre Palenque, mientras que la comadre Remedios Loza llegaría al parlamento como la primera mujer de pollera diputada.

Para la Elección Municipal de esta gestión, y en aplicación de la nueva Ley de Participación Popular, CONDEPA se impone en El Alto, llegando a la Alcaldía Walter Vargas Cerruto, con 5 concejales, mientras que otras organizaciones obtienen, ADN 1, MBL 1, MIR-NM 1 y MNR 1. El Alto es mayoritariamente populista. En las Elecciones Municipales de 1991, si bien mantiene su hegemonía CONDEPA con el alcalde Jaime Reyes Mérida con 5 concejales, aparecen otras organizaciones como UCS con 4, el MNR con 1 y AP con 3. Hay diversidad de partidos, pero con hegemonía populista.
A nivel nacional, en las Elecciones Generales de 1993, hay un nuevo régimen electoral, por el que se debe votar en dos papeletas por separado para presidencia y diputados. Se presentan 14 frentes, alianzas y partidos, de los cuales obtienen el primer lugar MNR-MRTKL de Gonzalo Sánchez de Lozada con 35,7%, segundo lugar Acuerdo Patriótico de Hugo Banzer Suárez con 21,1%, tercero CONDEPA de Carlos Palenque con 14,4%, cuarto UCS de Max Fernández con 13,8%. Goni asume el gobierno con su programa “Plan de Todos”, gobierno que gracias a las coaliciones genera cierta estabilidad. El Alto apoyará en su mayoría nuevamente al Compadre, mientras que La Paz apoyaría a Goni. En las siguientes Elecciones Municipales de 1995 nuevamente se posiciona CONDEPA en la alcaldía con Flavio Clavijo Gemio, obteniendo 49,2% de apoyo, seguido del MIR, el UCS y el MNR.
Para las Elecciones Generales de 1997 se incorpora el sistema mixto (proporcional para senadores y simple mayoría para diputados uninominales), el límite minino de 3%. De los 10 binomios, sin la presencia de los líderes populistas por fallecimiento de Carlos Palenque y Max Fernández, se tiene la siguiente secuencia. Primero para ADN-NFR-PDC de Hugo Banzer con 22,3%, seguido de MNR-MRTKL de Juan Carlos Duran con 18,2%, tercero CONDEPA de Remedios Loza con 17,8%, cuarto MIR-NM de Jaime Paz Zamora con 16,8% y quinto UCS de Ivo Kuljis con 16,1%. El Alto ratifica su apoyo CONDEPA, pues de las cuatro circunscripciones 3 son para éste partido, mientras que simplemente 1 corresponde al MIR.

En las Elecciones Municipales de 1999 obtiene la primera mayoría el MIR-NM con el 45,6%, seguido de CONDEPA, el MNR y el MBL, asumiendo como alcalde José Luis Paredes. La distribución de concejales correspondió al MIR con 7, a CONDEPA con 3 y al MNR con 1.

Las Elecciones Generales de 2002 se da un contexto de crisis económica y social, una crítica a la “clase política” y la “democracia pactada” y un ascenso de los movimientos sociales. De las 11 organizaciones políticas, obtiene el primer lugar la alianza MNR-MBL de Gonzalo Sánchez de Lozada con 22,5%, segundo el NFR de Manfred Reyes Villa con 20,9%, tercero el MAS de Evo Morales con 20,9%, cuarto la alianza MIR-NM-FRI de Jaime Paz Zamora con 16,3% y quinto el MIP de Felipe Quispe Huanca con 6,1%. El Alto, en esta elección, apoyaría de manera dispersa, de las cuatro circunscripciones, el MIR obtuvo dos escaños para el 13 y 14, el NFR uno el 15 y el MIP uno el 16.
En las Elecciones Municipales de 2004 logra el primer lugar el Plan Progreso (PP), que anteriormente fuera parte del MIR, posesionándose como alcalde a José Luis Paredes, con 8 concejales, seguido del MAS con 2 y otros con 1 concejal.

Las Elecciones Generales de 2005 se produce en un contexto de crisis social, que se había generado a nivel nacional, en ese contexto desde El Alto se produce la “Guerra del Gas” en 2003, que generará una agenda política nacional. También hubo reformas en el sistema electoral, pues ahora se podían elegir a los prefectos, que anteriormente eran designados. De las 8 fuerzas políticas, una sola organización política, el MAS, obtuvo un 53,7%, seguido de PODEMOS de Jorge Quiroga con 28,6%, tercero UN de Samuel Doria Medina con 7,8%, cuarto MNR de Michiaki Nagatani con 6,5% y quinto MIP de Felipe Quispe Huanca con 2,2%. Se posesiona como el primer presidente indígena a Evo Morales Ayma, con una mayoría absoluta para implementar políticas sin ninguna dificultad, cuya base le servirá para convocar a una Asamblea Constituyente a fin de modificar la Constitución Política del Estado. El Alto dio su apoyo al MAS, en las 4 circunscripciones uninominales.

El 2006 se eligió representantes para la Asamblea Constituyente, en un contexto altamente polarizado entre dos visiones de país, de los 255 constituyentes, la votación decanto hacia el MAS con 137 constituyentes, para PODEMOS con 60 constituyentes, otras pequeñas organizaciones políticas obtienen 58 constituyentes. En El Alto las cuatro circunscripciones correspondieron al MAS.
Las Elecciones Generales del 6 de diciembre de 2009 estuvo precedido por la aprobación de una Nueva Constitución Política producto de un referéndum que le dio legitimidad con el 64,4%, promulgado el 7 de febrero de 2009. Novedades en el sistema electoral fueron, la inclusión de la segunda vuelta, el voto de residentes en el exterior y las circunscripciones especiales indígenas. En estas elecciones se presentaron 8 candidaturas, obteniendo el primer lugar el MAS de Evo Morales Ayma con una bancada con más de dos tercios en ambas cámaras. A nivel departamental, las circunscripciones correspondían también al MAS, siendo en El Alto también del mismo color político las 4 circunscripciones (13,14,15 y 16).

A nivel municipal el año 2010 es la etapa de consolidación de la autonomía municipal, producto de reformas electorales, se elige por primera vez de manera separada a Concejales y Alcaldes, como dos órganos diferenciados. En las Elecciones Municipales del 4 de abril de 2010 en El Alto ganó el MAS-IPSP con el 45,0%, en un segundo lugar el MSM y en tercer lugar el UN. Se posesiona como nuevo alcalde municipal a Edgar Patana Ticona para la gestión 2010-2014.

En las Elecciones Generales del 12 de octubre de 2014 tuvimos la participación de 5 organizaciones políticas, imponiéndose con una mayoría el MAS con el 61,36%, seguido de UN con el 24,23% y tercero PDC con 9,04%. Asume la presidencia en representación de la población indígena nuevamente Evo Morales Ayma con una organización política de izquierda.

En las Elecciones Municipales de 2015 los alteños, a diferencia de la nacional, decidieron apoyar a Soledad Chapetón Tancara de UN con un 55% de votos, seguido por Edgar Patana del MAS con 31%. El partido político de tinte conservador, tuvo a una candidata que supo acomodarse al contexto popular de esta ciudad, posicionando a la “warmi alcaldesa” como líder emergente, base de su discurso político. El concejo municipal estuvo compuesto por 5 concejales de UN, 4 concejales del MAS y 2 concejales de SOLBO.

Las Elecciones Generales de 2020, se llevaron a cabo en un contexto de crisis política, por la desinstitucionalización generalizada, movilizándose la población, sumándose el amotinamiento de los policías y la sugerencia de renuncia de los militares, a lo que se llamó “Golpe de Estado”. La dimisión de Evo Morales permitió que se posicione como nueva presidenta a Jeanine Añez, en cuyo gobierno se autorizó a los militares intervenir los movimientos populares, generando una masacre en Sacaba y Senkata, generando varias muertes y heridos. En esto contexto, en estas elecciones participaron 5 partidos y alanzas políticas, en cuya elección obtuvo nuevamente una mayoría simple 55,11% el MAS posesionándose como nuevo presidente a Luis Arce Catacora por la gestión 2020-2025.

En el departamento de La Paz ganó el MAS con el 88,36%, en un segundo lugar CC con 28,88%. En El Alto las 4 circunscripciones correspondieron al MAS, teniendo como representantes a María Alanoca Tinta, Renan Cabezas Veizaga, Sabina Condori Calle y Felix Mayta Larico.

A nivel municipal, en las Elecciones Municipales del 11 de marzo de 2021, los alteños decidieron apoyar a una candidata disidente al partido gobernante, aunque, anteriormente fuera senadora del MAS, y que en esta oportunidad participara por la organización política Jallalla con el discurso de la “renovación”. Con una ideología afín al partido gobernante, pero con desacuerdos con su líder, es que esta organización política asume el municipio. Eva Copa Murga obtuvo un apoyo del 68,70% ganando a Zacarías Maquera del MAS. El concejo municipal se distribuyó en 8 concejales para Jallalla compuesto por Rogelio Maldonado, Guadalupe Mamani, Francisco Quispe, Víctor Contreras, Eva Pacheco, Christian Estévez, Rosalía Alanoca y Paola Quispe; y 3 para el MAS compuesto por Wilma Alanoca, Fabiola Furuya y Daniel Ramos.

Las Elecciones General del 17 de agosto de 2025, se desarrolla en un contexto de crisis económica producto de la falta de consensos en el espacio legislativo a causa de la división del partido gobernante, lo que no permitió aprobar créditos que permitirían oxigenar la falta de dólares, la falta de combustibles, la inflación y la subida de productos. De las 9 organizaciones políticas y alianzas, una se bajó días antes, contrario a las encuestas previas que daban como ganadores a organizaciones de ideología liberal, obtuvo el primer lugar el PDC de Rodrigo Paz Pereira con 32,06%, de ideología de centro, seguido de Alianza Libre de Jorge Quiroga Ramírez con 26,70%, tercer lugar para Alianza Unidad de Samuel Doria Medina con 19, 69%, cuarto lugar para Alianza Popular de Andrónico Rodríguez con 8,51%, quinto lugar para Sumate de Manfred Reyes Villa con 6,75%, sexto lugar para el MAS de Eduardo del Castillo con 3,17%, séptimo lugar para UCS de Jhonny Fernández con 1,67% y octavo lugar para ADN de Pavel Aracena con 1,45%, finalmente los votos blancos y nulos terminaron con 22,37%.

El departamento de La Paz vota mayoritariamente por PDC, aunque el municipio de La Paz apoya también a la Alianza Unidad, que obtiene diputados conservadores; siendo la ciudad de El Alto donde se registró una mayoría abrumadora para el PDC, lográndose un apoyo para las 4 circunscripciones uninominales, quienes representarán a la ciudad de El Alto para la nueva gestión de gobierno: Víctor Huaranca en la 10, Catherine Pinto en la 11, Hidilberto Marquéz en la 12 y Dionicia Chura en la 13. En esta oportunidad, más que con la sigla política, los alteños se identifican con la personalidad de los candidatos presidencial y vicepresidencial, cuyas características se reflejan más afines a los sectores populares.

Cultura política electoral alteña

La cultura política hace referencia a las bases culturales del ejercicio democrático de los alteños. Puede identificarse una predisposición a participar en las instituciones políticas, sean estas vecinales, educativas, gremiales, sindicales o colectividades que forman parte de la escuela democrática, con diversa incidencia en el sistema político. Según Gabriel Almond y Sidney Verba “la cultura política de una nación consiste en la particular distribución de las pautas de orientación hacia objetos político entre los miembros de dicha nación” (1970, p.31). Hace referencia, entonces, a las orientaciones colectivas de las sociedades, los mismos que suelen ser asumidos, internalizados y transformados por los individuos mediante la socialización política, sea por la familia, los medios de comunicación o la escuela.

La identificación de una cultura política colectiva de los alteños nos puede permitir realizar las siguientes apreciaciones. Primero, los alteños tienen una cultura política democrática, que deviene de su práctica cotidiana como las asambleas vecinales, organizaciones gremiales, sindicatos laborales, etc., donde la pedagogía democrática es una constante. Asumen el proceso electoral como una forma más de ejercicio democrático, reconociendo su importancia para construir gobierno.

Segundo, la elección de representantes políticos devela una cultura política alteña específica, caracterizado por su tendencia a posicionarse ideológicamente hacia organizaciones políticas de tendencia “endogenista”, “progresista”, “izquierdista”, “indigenista”, “socialista” y/o “populista”. Incluso en momentos en los que la organización política parece alinearse a enfoques más liberales como sucediera en el 2015 con UN, su candidata municipal Soledad Chapetón supo acomodarse a la realidad popular de esta ciudad, presentándose como una “warmi alcaldesa”, cuya recepción fuera positiva para su población. Incluso en la actual elección 2025, más que con la sigla del PDC, los alteños se identifican con la personalidad de los candidatos a presidente y vicepresidente, solo como ejemplo, el candidato presidencial participó en fraternidades folclóricas alteñas, lo que lo hace más próximo hacia lo popular.

Tercero, al posicionarse como el segundo municipio más poblado de Bolivia, El Alto se constituye en un actor político colectivo gravitante en el rumbo que vaya a tomar el país a la hora de elegir un gobernante. El Alto suele asumir una identidad política específica que lo distingue de los demás municipios, el mismo que puede determinar el rumbo del país. Históricamente, por ejemplo, en 1993 mientras a nivel nacional los bolivianos se decantaban por el gobierno neoliberal del MNR con Gonzalo Sánchez de Lozada como su líder, a nivel local los alteños se identificaban con el populismo de CONDEPA, liderado por el compadre Carlos Palenque y la comadre Remedios Loza, situación que permitirá posesionar a un alcalde de esta organización política en este municipio, que supo identificarse con su cultura popular.

Finalmente, la cultura política alteña está determinado por su construcción institucional histórica, en cuya base se encuentran las organizaciones comunitarias vigentes en las provincias andinas, las mismas que son trasladadas por los migrantes, actualizándose a manera de organizaciones vecinales en la ciudad de El Alto. La práctica política de las comunidades, son integradas a las formas de organización vecinal de esta ciudad, por lo que será prudente considerar esta práctica democrática comunitaria institucional, que hace de la democracia representativa una forma más de ejercicio político a la hora de otorgar legitimidad a los representantes políticos.

Bibliografía

Almond, Gabriel y Sidney Verba (1970). La cultura cívica. Madrid: Fundación FOESSA/Euroamérica
Fernández, Johnny (2021). Así nació El Alto. La Paz: FOCAPACI.
Torrens, Xavier (2019). “Elecciones y sistema electorales” (pp. 447-513) en Manual de ciencia política. Caminal, Miquel y Xavier Torrens. 5ta Edición. España: Tecnos.
Tribunal Supremo Electoral (2012). Atlas Electoral de Bolivia. La Paz: PNUD/SIFDE.

Abdón Zárate Fabián es filósofo, abogado, agricultor y futbolista. Actualmente se desempeña como docente de postgrado en la Universidad Indígena Aymara “Tupac Katari” y la Universidad Mayor de San Andrés.

(*) Abdón Zárate es filósofo y abogado, docente en la Universidad Pedagógica, presidente de la Asociación Boliviana de Filosofía (ABOF) e integrante de la Comunidad de Estudios de El Alto (CERCO).

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