La sopapeada alteña: El Alto entierra al MAS y rompe su propio hechizo
La caída del MAS no es una casualidad, es la culminación de un proceso de desintegración interna. La fractura entre el gobierno de Luis Arce y la facción de Evo Morales fue el tiro de gracia. El masismo, dividido, enfrentó una elección con dos candidatos: uno oficial (Del Castillo) y otro de facto (el voto nulo de Morales).