Por Guido Alejo (*)
En los últimos días se hizo eco un hecho que puso nuevamente en palestra la precariedad de la gestión territorial en la ciudad de El Alto, así como los conflictos que derivan de la presencia de un aeropuerto en medio de una ciudad en constante crecimiento. Un edificio de diez plantas fue construido de forma “clandestina” con una altura y proximidad al aeropuerto que, podría ser una causa para la suspensión de la certificación de “aeropuerto internacional” por la OACI (Organización de Aviación Civil Internacional) y algunas pistas podrían quedar inhabilitadas permanentemente.
Si bien es posible que este impase tenga una solución transitoria, hay dos causas estructurales que deben tomarse en cuenta, ya que influyen en la constitución misma de la ciudad, una es la ausencia de normas actualizadas y la otra, el traslado del aeropuerto a otro sector.
Sobre la normativa
El reglamento de uso de suelos de la ciudad de El Alto es una norma que data de 1996 y que está pensada para una ciudad que ya no es tal. En su momento fue planteada como normativa transitoria, la cual debió renovarse y actualizarse periódicamente conforme los requerimientos de evolución de la ciudad, lastimosamente el actuar de las sucesivas gestiones municipales dejaron de lado éste requisito normativo y se abocaron a una labor de legalización (amnistías) y de recaudación impositiva.
La primera “falta de respeto a la normativa” vino desde el Estado en su instancia municipal, al obviar la actualización de una norma de uso de suelos, adecuada a una realidad compleja y cambiante.
Esta ausencia de dirección estatal a través de la planificación urbana es una constante no sólo en El Alto, sino forma parte estructural de la misma constitución de una Bolivia que se cree “moderna”.
La “modernización” urbana entendida como planificación, regulación, ordenamiento y organización adecuada a un contexto concreto, no fue llevada en su plenitud por el Estado y sus deficiencias fueron llenadas por la misma sociedad, ya sea a través de la informalidad económica como la “clandestinidad” en cuanto a la expansión urbana.
Sobre el aeropuerto
El Alto se ha constituido como ciudad con el aeropuerto como barrera. Las vías se han estructurado tomando en cuenta la presencia del aeropuerto y éste ha condicionado las centralidades y los nodos de importancia urbana, siendo la Ceja el nodo más importante pero que en su estructura urbana representa un cuello de botella en la que se saturan múltiples actividades.
La presencia del aeropuerto ha motivado la construcción del imaginario mismo de la ciudad, segmentada en El Alto norte y El Alto sur como opuestos complementarios.
En este marco, en el presente siglo la población alteña, legisladores y empresarios, entre otros, han reclamado y sugerido el traslado del aeropuerto específicamente a la población de Laja, siendo los principales hechos los siguientes:
• El 17 de junio del año 2002, 400 juntas vecinales se movilizaron pidiendo el traslado del aeropuerto Internacional de El Alto a la población de Laja y un plan de modernización de esta ciudad.
• A fines de 2005 la Brigada Parlamentaria de La Paz planteó al Gobierno la asignación de presupuesto para la gestión 2006 en la que se contemplaban importantes proyectos viales y el traslado del aeropuerto internacional a Laja.
• El 20 de octubre de 2013 y en conmemoración de la fundación de La Paz en Laja, Evo Morales exhortó a los alcaldes vecinos de las ciudades de El Alto y La Paz a donar terrenos para construir un nuevo aeropuerto internacional.
• A fines del año 2013 el congreso de la Federación de Empresarios Privados de La Paz planteó que el aeropuerto debía ser trasladado a Laja, ya que el actual está alejado del parque industrial y se encuentra en pleno centro de El Alto.
Como se ha visto, la necesidad del traslado del aeropuerto no es unilateral, sino forma parte de un pedido de la sociedad en su conjunto y como tal es y será recurrente en los próximos años.
La subjetividad alteña tiene expectativas que no se han resuelto, en este caso, los imaginaros en torno a la “modernidad” que se expresaron en las movilizaciones masivas del 17 de junio de 2002.
Estas expectativas son extensivas a gran parte del ámbito popular boliviano, pese a ello, son llenadas por obras de infraestructura estatal que no necesariamente son planificadas, sino brindan una apariencia de contemporaneidad. Además, desde la misma sociedad se recrea el imaginario de “modernidad”1 en base a las mansiones alteñas (mal llamados “cholets”) con sus múltiples estéticas.
El deseo de tener un centro urbano, rascacielos y grandes avenidas centrales (como los que se imaginan en terrenos del aeropuerto) también obedecen a esta lógica, que forma parte de las reconfiguraciones sociales actuales en nuestro país.
Posibilidades
Tanto la normativa como la planificación a raíz del traslado del aeropuerto implican la elaboraron de un plan integral de desarrollo de El Alto que obedezca a uno de escala metropolitana y regional.
Esto tiene muchas implicaciones, ya que planificar a esta escala implica también premisas para una planificación a escala nacional que debería enmarcarse en un proceso de “modernización” estatal adaptada a las necesidades bolivianas.
En el caso de las normas de construcción, éstas deben responder a nuestra realidad y necesidades concretas, su elaboración debe ser abierta y participativa, sin embargo, no deberían abordarse solo desde el aspecto de implementación de un reglamento solitario, sino debe ser apoyado por medidas de desburocratización de los procesos de administración estatal y la adopción de alta tecnología (sistema de software especializado) para la agilización de trámites ante el Estado lo que implica la reingeniería de los servicios ediles.
La informalidad en las construcciones en muchos aspectos es causa de la burocracia estatal y la ausencia de normas de construcción actualizadas. En relación al aeropuerto, su traslado se hará previa construcción de uno nuevo, lo que implica complejos estudios de factibilidad en cuanto a su ubicación2 y diseño, éstos trabajos pueden hacerse en los años venideros hasta que el país se recupere económicamente.
El costo del aeropuerto dependerá del diseño y significaría una inversión que beneficiaría a toda el área metropolitana. No olvidemos que en los últimos años se han destinado grandes recursos a infraestructura como las líneas del teleférico (23,5 millones $us/km, 750 millones $us en total) y el Centro de Investigaciones nucleares (351 millones de $us).
Posiblemente de haberse priorizado la construcción del aeropuerto estos recursos hubieran sido suficientes para la construcción de una terminal de vanguardia y, además, El Alto ya hubiera afrontado la construcción de su centro urbano.
Es necesario reflexionar sobre qué ciudad queremos para el siglo XXI según los requerimientos contemporáneos. Así como las posibilidades de visión de metrópoli, visión de país y jugar un papel geopolítico en la región.
El Alto es un importante polo poblacional, económico y político, además de ser el municipio que liderará el desarrollo de la metrópoli, debe proyectarse al pacífico y al Asia del siglo XXI, para ello es necesario reconocer su realidad concreta, aprovechar sus potencialidades para su consolidación como vanguardia, para ello será necesaria una intelectualidad que de lineamientos y una clase política que posibilite su materialización. Ese es el horizonte…
1 Ver: Alejo, G. (agosto de 2020) Repensando la modernidad desde los imaginarios “populares” en Periódico digital Pukara #168
2 En relación a su ubicación el criterio más difundido es que debería situarse en el municipio de Laja, sin embargo, hubiera sido óptimo que se ubicase cerca a Patacamaya ya que hubiera centralizado en una única terminal las necesidades de las ciudades de El Alto, La Paz y Oruro, además de conectarse con la carretera bioceánica.
Bibliografía consultada
Alejo, G. (agosto de 2020) Repensando la modernidad desde los imaginarios «populares». Periódico Pukara #168 recuperado de https://www.facebook.com/groups/104122321484/permalink/10157593420801485/
ANF (13 de Junio de 2002) Alteños exigirán el traslado del aeropuerto a Laja. Bolivia.com Recuperado de https://www.bolivia.com/noticias/autonoticias/DetalleNoticia6762.asp
ANF (13 de noviembre de 2005) Parlamentarios plantearán presupuesto para ejecución de proyectos viales. Noticiasfides.com. Recuperado de https://www.noticiasfides.com/nacional/sociedad/parlamentarios-plantearan-presupuesto-para-ejecucion-de-proyectos-viales-en-248960
Página Siete (20 de octubre de 2013) Evo desafía a alcaldías a donar terreno para nuevo aeropuerto. Paginasiete.bo. Recuperado de https://www.paginasiete.bo/economia/2013/10/21/desafia-alcaldias-donar-terreno-para-nuevo-aeropuerto-3764.html
Empresarios plantean traslado del aeropuerto de El Alto a Laja. (18 diciembre de 2013) Recuperado de https://avionesbolivia.blogspot.com/2013/12/empresarios-plantean-traslado-del.html
Luna, P. (13 de octubre de 2020) Alcaldía conmina a dueño a demoler edificio que afecta el aeropuerto de El Alto. Opinión.com.bo. Recuperado de https://www.opinion.com.bo/articulo/pais/alcaldia-conmina-dueno-demoler-edificio-afecta-aeropuerto-alto/20201013222842791112.html
ANF (6 de Junio de 2019) Niegan sobreprecio en la construcción del Teleférico. Elpais.Bo. Recuperado de https://elpais.bo/nacional/20190606_niegan-sobreprecio-en-la-construccion-del-teleferico.html
Revista RD Energía (13 de febrero de 2020) La estatal rusa Rosatom continúa la construcción de un centro nuclear en Bolivia tras el anuncio del gobierno de facto de Añez sobre su suspensión. Revistadeenergia.com. Recuperado de https://revistardenergia.com/la-estatal-rusa-rosatom-continua-la-construccion-de-un-centro-nuclear-en-bolivia-tras-el-anuncio-del-gobierno-de-facto-de-anez-sobre-su-suspension/
(*) Guido Alejo es arquitecto y miembro de Comunidad Pukara guidoalejo.wordpress.com