Aquello que está escrito en piedra no se borra. Quizá en eso pensaron quienes en 1849 esculpieron el Escudo de Bolivia en piedra y lo fijaron en un pilar que puede verse cada vez que uno visita la feria 16 de julio de la ciudad de El Alto.
Se trata del Mirador Faro Murillo, también conocido como Mirador Alto Lima, un pilar edificado cerca de la plaza Ballivián de Alto Lima. Ésta sostiene una columna de cuatro lados y siete metros de alto, en el que se encuentra un Escudo de Bolivia y palabras escritas en español antiguo y latín.
Este testigo mudo de la historia fue tallado durante el gobierno del presidente Manuel Isidoro Belzu y a lo largo del tiempo ha sobrevivido a las inclemencias del tiempo y al descuido.
«La columna del Faro Murillo es rectangular hasta los cuatro metros y piramidal de ahí hacia arriba; lo remata una antorcha. Este lugar se conoce con el nombre de Faro Murillo y es similar al mirador que está emplazado en la Ceja de El Alto», menciona la reseña de este atractivo turístico incluida en el texto El Alto para todos, que publicó el gobierno municipal.
Precisamente a 1,60 metros de la base de la columna rectangular se puede observar la piedra de aproximadamente 60 por 50 centímetros.
En ella está yace el símbolo patrio con la inscripción de 1849. Éste lleva cuatro lanzas, cuatro fusiles, dos cañones, un hacha, el gorro frigio, una alpaca, un cerro, seis estrellas y la inscripción “República Boliviana” en medio del óvalo.
Aunque es ignorada por los transeúntes y comerciantes que a diario caminan por esta plaza, quien quiera contemplarla solo debe acercarse al pilar y podrá atestiguar cómo la historia de Bolivia también se ha construido desde esta ciudad.